A 38 años del golpe militar, el predio de la Ex ESMA -donde unas 5.000
personas fueron torturadas y desaparecidas, entre 1976 y 1983- se propone como
un ámbito de homenaje a las víctimas y de condena a los crímenes de lesa
humanidad.
En la actualidad, se realizan visitas guiadas y actividades
culturales; y hasta se instaló un canal de televisión que depende del
Ministerio de Educación.
El 24 de marzo se cumple el trigésimo octavo aniversario del
golpe de Estado que implantó en el país el “terror más profundo que ha conocido
la sociedad argentina”, según definiera el periodista Rodolfo Walsh. A partir
de esa fecha, en la Escuela
de Mecánica de la Armada
(ESMA) funcionó paralelamente uno de los centros clandestinos de detención,
tortura y exterminio más emblemáticos de la última dictadura. Allí llegó a
establecerse una sala clandestina de maternidad, donde nacieron al menos 34
bebés de detenidas-desaparecidas, que fueron posteriormente apropiados.
Ubicado sobre la
Avenida del Libertador, en plena zona norte de la Ciudad Autónoma de
Buenos Aires, fue uno de los mayores Centros Clandestinos de Detención, Tortura
y Exterminio del país que funcionó entre 1976 y 1983. Se estima que allí fueron
detenidas, torturadas y desaparecidas unas 5.000 personas.
El predio fue recuperado en 2004. A partir de allí, su
administración dependió de los gobiernos nacional y porteño; y de organismos de
derechos humanos. Sin embargo, el mes pasado, ambos gobiernos firmaron un
convenio que transferirá el control del predio a la Nación por 30 años.
En la actualidad, el Espacio Memoria y Derechos Humanos (ex
ESMA) se propone como un ámbito de homenaje a las víctimas y de condena a los
crímenes de lesa humanidad cometidos durante el terrorismo de Estado.
Allí se realizan visitas guiadas, exposiciones culturales y
artísticas; se llevan a cabo actividades para preservar la Memoria ; y se asentó el
canal televisivo Encuentro, dependiente del Ministerio de Educación de la Nación.
Los orígenes de la
ESMA
El predio donde funcionaba la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), fue cedido
por el Concejo Deliberante porteño al Ministerio de Marina por un decreto de
1924, para que fuera utilizado como centro de instrucción militar. El texto
establecía que ante cualquier cambio en el destino de las instalaciones el
predio debería regresar al poder de la Ciudad.
A partir del golpe de Estado de 1976, en la sede educativa
funcionó paralelamente uno de los centros clandestinos de detención, tortura y exterminio
más emblemáticos de la última dictadura.
El Plan Sistemático de represión ilegal
A partir del golpe de Estado del 24 de marzo de 1976, se
instauró en el país una dictadura que posibilitó la imposición de un modelo de
país autoritario, económicamente regresivo y socialmente injusto requerido por
los centros de poder internacional y los grupos económicos concentrados.
En un contexto de fuerte movilización social que caracterizó
los inicios de la década de 1970, las Fuerzas Armadas comenzaron a desarrollar
operativos ilegales, avanzando sin pausa hacia la usurpación del poder estatal.
Más de 1.500 víctimas -muchas de ellas desaparecidas- fueron
el resultado de los asesinatos y secuestros efectuados por la Triple A y otras bandas
organizadas, armadas y financiadas desde sectores gubernamentales. Así, se
allanó el camino para el golpe de Estado que derrocó un gobierno
constitucional, con la eliminación de todo vestigio democrático.
Tras el golpe de 1976, la dictadura institucionalizó y
potenció el modo represivo previamente ensayado: la metodología de secuestro,
tortura y desaparición; y la instauración de los centros clandestinos de
detención como dispositivos de exterminio de los prisioneros y de diseminación
del miedo hacia la sociedad. En esa red de más de 500 centros desplegada a lo
largo del país, la Escuela
de Mecánica de la Armada
(ESMA) constituyó un engranaje emblemático.
El centro clandestino de Detención, Tortura y Exterminio
Desde el edificio del Casino de Oficiales y con el sostén y
la cobertura del resto de las instalaciones, el Grupo de Tareas 3.3.2
(GT3.3.2), creado en 1976 por el entonces almirante Emilio Massera, ejecutó una
acción terrorista que cumplió un rol determinante en la desarticulación de
organizaciones populares y la captura y desaparición forzada de alrededor de
5.000 personas.
Una de las particularidades de este centro fue el
funcionamiento de una sala clandestina de maternidad, donde nacieron al menos
34 bebés de detenidas-desaparecidas, que fueron posteriormente apropiados.
La recuperación
La recuperación del predio que ocupaba la ESMA fue asumida como
política de Estado a partir de 2003, en el marco de la lucha de los organismos
de derechos humanos de la
Argentina por la
Memoria , la
Verdad y la
Justicia. El 24 de marzo de 2004, al cumplirse el vigésimo
octavo aniversario del golpe, el Gobierno Nacional anunció la creación del
Espacio Memoria y DDHH (ex ESMA).
En aquella oportunidad, ante miles de manifestantes de
derechos humanos, Madres y Abuelas de Plaza de Mayo que erigían la consigna
“Nunca Más”, Néstor Kirchner manifestó: “Como Presidente de la Nación Argentina
vengo a pedir perdón de parte del Estado nacional por la vergüenza de haber
callado durante 20 años de democracia por tantas atrocidades”.
Y definió: “Hablemos claro: no es rencor ni odio lo que nos
guía y me guía, es justicia y lucha contra la impunidad. A los que hicieron
este hecho tenebroso y macabro de tantos campos de concentración, como fue la ESMA , tienen un solo nombre:
son asesinos repudiados por el pueblo argentino”.
Luego de efectivizada la desocupación por parte de las
Fuerzas Armadas, el 20 de noviembre de 2007, el predio de la ex ESMA quedó bajo
la administración de organismos de derechos humanos, del Gobierno nacional y
del porteño.
No obstante, a mediados de febrero el jefe de Gabinete,
Jorge Capitanich, confirmó la firma de un convenio con el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, por
el cual se decidió ceder por 30 años al Estado nacional la administración de la
ex ESMA y de todos los ex centros clandestinos de detención y tortura ubicados
en la Capital
Federal.
“Se transfiere el usufructo por 30 años al Gobierno nacional
para que pueda hacer una reinversión, llevar políticas más intensas y
profundizar las políticas de Derechos Humanos”, informó el funcionario.
El Espacio hoy
En la actualidad, el Espacio Memoria y Derechos Humanos (ex
ESMA) se propone como un ámbito de homenaje a las víctimas y de condena a los
crímenes de lesa humanidad cometidos durante el terrorismo de Estado.
Se plantea, además, como un ámbito de referencia nacional e
internacional de políticas públicas de memoria, de promoción de valores
democráticos y de defensa de los derechos humanos.
Es un lugar de intercambio cultural y de debate social sobre
el terrorismo de Estado y la experiencia genocida; un espacio de reflexión
sobre el pasado reciente.
Las visitas guiadas al predio, los congresos, los programas
educativos, las actividades culturales y la producción de contenidos son
algunas de las herramientas que utiliza para cumplir con ese objetivo.
Caminando la
Memoria
Durante la última dictadura cívico militar el predio que
ocupara la Escuela
de Mecánica de la Armada
estuvo al servicio de la actividad represiva, constituyendo uno de los Centros
Clandestinos de Detención, Tortura y Exterminio más emblemáticos del país.
La base operativa de la represión se ubicó en uno de sus
edificios: el Casino de Oficiales, complejo habitacional y comedor de las altas
jerarquías de la Marina. La
Armada eligió este lugar para concentrar, torturar y exterminar a alrededor de
5.000 hombres y mujeres, la gran mayoría de los cuales permanecen
desaparecidos. En 2008, el ex Casino de Oficiales fue declarado Monumento
Histórico Nacional y constituye un testimonio material de los crímenes que allí
se cometieron y que aún son investigados por la Justicia.
En el Sitio Histórico se realizan visitas guiadas, de
carácter gratuito y con una duración aproximada de tres horas. Los recorridos
se realizan de martes a sábados y los turnos pueden ser reservados vía correo
electrónico (visitasguiadas@espaciomemoria.ar). Desde la apertura del Espacio
Memoria y Derechos Humanos, más de 120 mil personas han participado de las
visitas.
En ellas se relata cómo fue el funcionamiento del Centro
Clandestino de Detención, Tortura y Exterminio en el marco del sistema
represivo y el contexto político, social, cultural y económico, buscando la
participación, el debate y la reflexión de los visitantes.
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*Publicado en la edición # 184 de Revista Metro (Marzo de 2014)